Bandera gitana

Bandera gitana
Bandera gitana

martes, 3 de septiembre de 2019

La imagen del beato cristiano gitano y mártir, el tío Ceferino, en procesión...

Poco a poco va aumentando la devoción a este primer mártir gitano de la historia de la Iglesia. 


APUNTES SOBRE SU VIDA Y SU OBRA.-

La vida de Ceferino huele a Jesucristo y nos recuerda que todos podemos ser santos en nuestra vida concreta.
Ceferino vivió su condición de gitano, esposo, tío, tratante... desde una profunda vida cristiana.
Vivió su fe cristiana en un  clima profundamente gitano.
Ceferino supo unir lo mejor de los gitanos y lo mejor de los “payos”, la libertad del nómada y la estabilidad del sedentario, la gracia del  Evangelio y la cultura gitana.
Ceferino, desde el conocimiento progresivo de Jesucristo, aprendió a optar por el más débil y a pagar de buena gana el precio de la amistad y la fidelidad.
Ceferino Jiménez Malla, "el Pelé",  nació en Benavent de Segriá (Lérida), allá por el año 1.861. Su familia pasaba por tierras catalanas, en su largo peregrinar de pueblo nómada.
Cuando era pequeño viajaba de feria en feria con sus padres, vendiendo canastas y comprando y vendiendo caballerías. Conoció a Teresa, una gitana joven con quien se casó al estilo gitano, aunque en 1.912 formalizó su unión según el rito católico. Poco después comenzó a frecuentar la iglesia hasta convertirse en un cristiano modelo: asistía todos los días a misa, recibía la Comunión y se dedicaba a obras de apostolado y de caridad. Establecieron su hogar en Barbastro (Huesca).
Se dedicó al trato de caballerías, y todos le respetaban como hombre honrado y fiel a su palabra. No tuvo hijos, pero su modo de ser atraía especialmente a los niños. Les hablaba de la bondad de Cristo y el amor del Dios-Padre. Siempre tenía las puertas de su casa abiertas a quien necesitara su ayuda y su amistad, sin distinción. Se dedicó a pacificar  a los gitanos y a a solucionar los conflictos con los “payos”. Tuvo que soportar cruces y contratiempos, pero siempre fue un hombre de paz. En 1.926 se hizo Terciario Franciscano y  desde 1.931, frecuentó la Adoración Nocturna.
Pero llegó la guerra civil. Un día encontró a un sacerdote que era  molestado en la calle: Salió en su defensa y los soldados le detuvieron por encontrar un rosario en su bolsillo. Su solidaridad y valentía le llevó a la cárcel donde confiesa su Fe católica y vive cristianamente aquella dura experiencia. Pudo librase de la cárcel si entregaba el rosario y prometía no rezar en público. Pero no aceptó desprenderse de su rosario ni renegar a la fe que profesaba. Después de dos semanas en la cárcel, el 2 de Mayo, es asesinado en el cementerio de Barbastro junto a otros presos. De su mano cuelga el Rosario.
Vivió siempre según sus fuertes raíces gitanas, dando a conocer su amor a los demás y a Dios, siendo alegre, humilde y servicial.

Fue beatificado por Juan Pablo II el 4 de mayo de 1.997. Es el primer gitano que sube a los altares.

FRASES PARA MEDITAR

* La beatificación de Ceferino es un hecho histórico de supremo valor.
* Sintió apasionado amor por Cristo.
* Nunca renunció a su fe en Cristo.
* Ceferino es un signo de la fuerza del Evangelio, capaz de florecer en todos los tiempos y culturas.
* Si es de admirar su comportamiento en el momento del martirio,  mucho más admirable resulta su profunda fidelidad a los valores de las personas y en especial siendo cristiano católico y gitano.
* Fue respetado tanto por los gitanos como por los no gitanos.
* Vive la coherencia evangélica con todas su consecuencias.
* La beatificación de Ceferino es una llamada para que el pueblo gitano sea más respetado y valorado de lo que ha sido hasta ahora.
* No hace falta perder la identidad gitana, para vivir intensa y coherentemente, el Evangelio.



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